Yoga y vela.

En estos días de buenos deseos y nuevos propósitos para el año que entra, solemos tener tiempo para pensar que hemos hecho y qué vamos a hacer de nuestra vida. Pues bien, soy poco místico o espiritual, pero últimamente he leído y escuchado de más de una fuente, recomendaciones sobre lo adecuado que es el Yoga para los que practicamos vela.

Por lo visto una de las cosas que más favorece el Yoga es el equilibrio y la respiración. Los navegantes han de aprender a notar cuando su barco va rápido, es decir, a sentir su barco. Por lo visto todos sentimos la forma en la que se mueve el barco a través de nuestro equilibrio, y por tanto, como el Yoga nos lo afina, también afinará nuestro navegar.

Os contaré mi opinión, porque yo hace años fui a un par de clases de Yoga. Tiendo mucho a resumir lo que cuento, pero para hacer un título os diré que el Yoga para mi es un ejercicio interesante, que viene con algo más. Ese "algo más" es justo lo que yo no conseguí apreciar en su momento. Para los entendidos, os diré que lo primero que yo probé es lo que llaman Bikram Yoga (90 minutos de Yoga en una sala a 40ºC, y una de las razones por las que no repetí).

Desde el punto de vista del ejercicio en sí, me llamó mucho la atención como intentando posturas mi corazón alcanzaba ritmos bastante altos, que alargados durante una clase, son un ejercicio nada desdeñable para mi. La persona que daba la clase a la que yo asistí, insistía y vigilaba mucho en la forma de respirar, que es mejor que os explique alguien que conozca el tema mejor que yo, pero que por lo que llegué a entender es el kid de la cuestión.

Al final de la clase, después de una relajación bien ganada, recuerdo una sensación bastante relajante, y unas agujetas importantes el día siguiente. Casi como las que produce navegar en láser, y que tanto nos gustan según la 3ª ley del Laserista Torpe.

Yo la verdad no tengo pensado anotarme ya mismo a las clases de yoga, porque creo que aun me queda mucho que mejorar simplemente navegando, pero espero que os sirva de ayuda a los que os lo estéis pensando.

Me cambio.

Habréis notado que ultimamente ya no escribo demasiado en el blog, y es que he estado replanteándome esto de la vela y el láser. No es que me aburra de la vela, al contrario sigo navegando como el primer día o más. Pero ya han pasado unos años y la evolución es normal tanto en la vida como en la vela.

En la jornada con Iker Martínez del mes de octubre, algo hizo click en mi cabeza al oir hablar a Iker sobre cómo evolucionará la vela estos próximos años. Foils, pesos reducidos, grandes superficies vélicas, carbono... Era algo reticente a todo esto hasta que conseguí probar uno de estos.

 

La chica es Hawaiana, pero el barco es un Moth internacional, uno de esos barcos que se han hecho famosos por "volar" o salir fuera del agua mediante foils. La diferencia es que esta fue la primera clase de barco en conseguir volar. Todos los demas, incluyendo los catamaranes de la última Copa América, son meras copias del concepto.

Hay varias personas en la ría de Vigo interesadas en la compra de un Moth, así que nos hemos juntado para ahorrar transportes y conseguir un buen precio en Inglaterra. Si todo va bien, después de reyes llegará a Vigo mi flamante Moth y os empezaré a contar mis pinitos en la clase.

Aprovechando la coyuntura, voy a cambiar el nombre del blog y la estética, pero empezando por el nombre, que pasará a ser www.mothvigo.com y que espero que visitéis para contarme que os parece.

Os dejo con uno de los vídeos que me ha conquistado para cambiarme de clase.


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